A priori parecía perfecta, pero comienza de la peor de las maneras. El barranco de Minyerola resulta prácticamente imposible de realizar en bici, por lo menos con nuestro nivel, con lo que nos pasamos casi 3 km andando con la bici a cuestas, debido a las piedras sueltas que hay durante todo el barranco... Debemos recordar no pasar más por esta zona, que no nos gusta nada. Parece más propio de motos de enduro (de hecho vemos varias), que de mtb.
Tras este esfuerzo inicial, ya andamos "tocados" el resto de la ruta, que se hace por sendas ya conocidas de la zona de Picassent.
Hacemos las paradas de rigor para almozar el el bar Karamba de Alfarp, y unas cuantas fotos en el mirador.
La parte final de la ruta también se nos hace bastante dura, sin duda por el cansancio acumulado en la parte del barranco, y al calor. También una fuerte caída de José, que lo deja con el codo dolorido. Pero lo mejor de todo, como siempre, la gran compañía!
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